El motivo de consulta de las pacientes candidatas a este tipo de intervención es el exceso de volumen de los labios menores, que suelen ser desproporcionados respecto los mayores y en ocasiones sobresalen con un aspecto arrugado y oscuro.
Además de suponer un problema estético, la hipertrofia de labios menores puede dificultar la colocación de prendas de vestir y provocar dolor durante la práctica deportiva y el coito.
Este problema puede darse tanto en mujeres jóvenes como de edad avanzada, y algunas de sus causas principales son los partos por vía vaginal, causas genéticas, el envejecimiento o los piercings genitales.
En la primera visita se realiza una historia clínica haciendo especial énfasis en medicaciones y otros productos, y una exploración física completa.
En algunos casos se requieren estudios hormonales previos y mamografías para ver el tejido predominante.
La visita se completa con una serie de fotografías estandarizadas.
Antes de la intervención se realizan unas pruebas preoperatorias generales (analítica general, electrocardiograma y radiografía de tórax).
La intervención se realiza bajo anestesia local y sedación, y tiene una duración de una hora aproximadamente.
Se realiza una resección del exceso de labios menores, de forma que al finalizar la intervención éstos queden completamente ocultos por los labios mayores, y con el máximo de simetría. En algunos casos se complementa el tratamiento con el engrosamiento de los labios mayores mediante la inyección de grasa de la propia paciente.
Se trata de una cirugía ambulatoria (no requiere ingreso hospitalario).
La paciente debe permanecer en reposo relativo durante 48 horas tras la intervención.
La inflamación en la zona puede persistir durante 2-3 semanas.
Las relaciones sexuales se pueden reiniciar tras 4 semanas.
No es necesario retirar los puntos realizados en la intervención, ya que se van degradando y se eliminan durante la higiene íntima.