En la primera visita se realiza una historia clínica completa, y una exploración física donde se valora la morfología del paciente (general, y brazos en particular), así como aspectos concretos como asimetrías, elasticidad de la piel y volumen de grasa subcutánea.
La visita se completa con una serie de fotografías estandarizadas y mediciones.
Antes de la intervención se realizan unas pruebas preoperatorias generales (analítica general, electrocardiograma y radiografía de tórax).
Habitualmente se inicia la intervención realizando una liposucción de la cara interna de los brazos para adelgazar al máximo la grasa subcutánea, sin provocar grandes alteraciones en el sistema linfático.
A continuación se procede a la resección del exceso de piel también en la cara interna, de forma que la cicatriz final sea lo menos visible posible. Habitualmente la cicatriz se extiende desde la axila hasta 4-5cm por encima del codo.
La intervención se realiza bajo anestesia general y tiene una duración de dos horas aproximadamente.
En general se colocan drenajes aspirativos y se recomienda ingreso hospitalario durante 24 horas.
Antes del alta se retiran los drenajes y el vendaje se colocan unos manguitos de compresión que se deberán llevar durante un mes.
Las recomendaciones específicas al alta son realizar reposo relativo y evitar los pliegues en los manguitos.
Inicialmente puede existir cierta inflamación en la zona intervenida y algunos hematomas superficiales, pero el dolor se controla con una pauta de tratamiento analgésico y antiinflamatorio.
Los puntos se retiran en Consulta a los 7-10 días. En general, las pacientes pueden reincorporarse al trabajo a los 7 días.